martes, 28 de octubre de 2008

Derechos de la Juventud durante la XVIII Cumbre.

Cientos de jóvenes de la zona rural de El Salvador marcharon el viernes en esta capital para exigir al presidente Antonio Saca que ratifique la Convención Interamericana de los Derechos de la Juventud durante la XVIII Cumbre.

Los manifestantes, del Movimiento de la Juventud Rural de siete departamentos del país, intentaron llegar a la Casa Presidencial para entregar la demanda al mandatario, donde le hacen ver que esta población ha sido marginada de las políticas gubernamentales.

El dirigente juvenil Wilfredo Henríquez rechazó la posición de Saca de negarse a ratificar dicho convenio al argumentar que la misma riñe con la Constitución del país centroamericano.

La protesta se realizó a menos de una semana de la Cumbre Iberoamericana que reunirá a 19 jefes de Estado y Gobierno de la región, cuyo tema central del encuentro será "Juventud y Desarrollo".

Saca afirmó que no ratificará el acuerdo en la cumbre porque viola la Carta Magna de la República, luego que la Iglesia católica de El Salvador le reclamó que el documento que se discute está contra la moral de los jóvenes y la familia.

El punto de discordia es la educación sexual y reproductiva, pues según la Iglesia, el documento que se redacta da la libertad para que los jóvenes decidan por sí solos cuando tener relaciones sexuales, sin la orientación de sus padres.

Esa situación ha causado polémica en la sociedad salvadoreña y son más los sectores representativos del país que piden ratificar la convención para el bien de la salud de la juventud.

Para Henríquez, ni el gobierno ni la Secretaría de la Juventud cuentan con los programas suficientes para orientarlos en salud, educación, recreación y cultura.

"La situación de la juventud rural en El Salvador es precaria. La Convención Iberoamericana de Derechos de la Juventud nos permitiría a nosotros de la zona rural tener una herramienta que sirva para exigir nuestras demandas", acotó el dirigente.